El cultivo de arándanos ha experimentado un auge en popularidad debido a sus beneficios para la salud, su relativamente larga vida postcosecha y su gran apreciación por los consumidores. Si bien tradicionalmente se han cultivado en suelos ácidos y bien drenados, los avances en técnicas agrícolas han abierto nuevas posibilidades, como el cultivo de arándanos mediante hidroponía con sustrato. En este artículo, exploraremos los fundamentos de esta técnica innovadora y cómo puede ofrecer ventajas en términos de rendimiento y calidad de los frutos.
Ventajas de la hidroponía con sustratos de fibra de coco.
La hidroponía es una técnica que implica el cultivo de plantas en un entorno acuático, donde se emplean soluciones minerales en lugar de tierra para proporcionar nutrientes a las plantas. También se incluye el uso de diversos sustratos, como la fibra de coco, que forman parte de las prácticas de hidroponía, los cuales aportan las características de fijación y aireación que necesitan las plantas para su desarrollo.
Al aplicar esta técnica al cultivo de arándanos, se obtienen varias ventajas:
- Adecuación de las condiciones de pH, conductividad: el cultivo del arándano no está adaptado a su cultivo en suelos alcalinos, los cuales conforman la mayoría de los suelos disponibles para cultivo a nivel global. Por ello, su introducción en zonas con este tipo de suelos es muy ardua. A través del uso de tecnologías como la hidroponía podemos llevar al cultivo a criarse en un entorno óptimo desde el punto de vista de la acidez y la conductividad eléctrica a través de la gestión de la fertirrigación.
- Alta capacidad de drenaje: Mediante la configuración idónea del sustrato podemos crear un entorno de elevado volumen de aireación que permita el desarrollo del cultivo, ya que el arándano es un cultivo muy exigente en materia de drenaje, se adapta con dificultades a terrenos puramente arcillosos por lo que con el uso del sustrato adecuado de fibra de coco, podemos logran las condiciones precisas para que el sistema radicular no se vea afectado por encharcamientos ni estreses derivados por asfixia radicular.
- Control optimizado de nutrientes: permite una administración exacta de los nutrientes esenciales para las plantas, lo que puede aumentar el rendimiento y la calidad de los frutos.
- Menor consumo de agua: la hidroponía suele requerir menos agua en comparación con el cultivo en suelo, ya que los sistemas de recirculación permiten reciclarla y volver a aplicarla directamente al cultivo tras someterla a procesos de desinfección o bien emplearla en el riego de otros cultivos aledaños.
- Menor riesgo de enfermedades: al evitar el suelo, se reduce el riesgo de enfermedades transmitidas por patógenos del suelo, como virosis u hongos que son capaces de permanecer latentes en el suelo y posteriormente infectar los cultivos.
- Aumento del aprovechamiento de la superficie productiva: esta metodología permite la producción de plantas con marcos de plantación menores a los que se realizan las plantaciones tradicionales. Pudiendo llegar a densidades de entre 8.000 a 10.000 plantas por hectárea, a diferencia de la densidad típica del cultivo en suelo que está en torno a los 2.500-5.000 plantas por hectárea. Esto contribuye a una mejora relativa del rendimiento respecto a la superficie, produciendo mayor cantidad de frutos por unidad de superficie.
El cultivo de arándanos mediante el uso de fibra de coco es una técnica innovadora que ofrece ventajas significativas en términos de rendimiento y calidad de los frutos. Al cultivar en fibra de coco y mantener un monitoreo constante, puede disfrutar de una cosecha exitosa de arándanos de alta calidad en un entorno controlado y eficiente. Esta técnica representa una opción prometedora para los agricultores que desean diversificar sus métodos de cultivo y producir arándanos en zonas donde la tipología de suelo existente no lo permite